En la capital ecuatoriana, ¡las infracciones tienen precio! En Quito, el Municipio no se anda con juegos y ha impuesto una multa equivalente al 50% de un salario básico unificado, es decir, USD 225, a aquellos valientes que osen quemar basura, papeles, envases y otros desechos a la intemperie. No es broma, pues recientemente un residente del sector de Guangopolo experimentó esta sanción de primera mano.

Esta medida, aplicada por la Agencia Metropolitana de Control (AMC), surge en un contexto donde las dependencias de la Alcaldía intensifican su monitoreo para prevenir las quemas y posibles incendios forestales. Para ello, el patrullaje diario de zonas de riesgo se lleva a cabo en conjunto con entidades como el Cuerpo de Bomberos, Cuerpo de Agentes de Control, EP Emseguridad, Policía Nacional, entre otros.

Y como si la multa no fuera suficiente, el Código Orgánico Integral Penal (COIP) eleva el tono, estableciendo penas de uno a tres años de prisión para aquellos que, de manera directa o indirecta, provoquen incendios en zonas vitales como bosques y páramos. Los infractores, ¡cuidado! Porque si la consecuencia es la muerte de una persona, el castigo asciende a 13-16 años en prisión.

Y, para rematar, hoy el cerro Auqui enfrenta un gran desafío. Un incendio forestal persiste, y alrededor de 25 bomberos junto con 13 vehículos siguen en labores para controlarlo. Es un recordatorio potente de por qué es esencial reportar y evitar las quemas. ¡Hagamos de Quito un lugar más seguro!