Un curandero de 55 años fue detenido en la comarca de Paradanta, Pontevedra, tras ser acusado de obligar a sus pacientes a tener relaciones sexuales bajo el engaño de supuestos rituales de sanación. El hombre se presentaba como santero y ofrecía tratamientos con hierbas, rezos y conjuros, pero a varias mujeres les aseguró que, para expulsar espíritus malignos, era necesario acostarse con él. La detención ocurrió el 22 de agosto luego de que varias víctimas se atrevieran a denunciar lo vivido. Según el reporte policial, el curandero tenía un patrón repetido en el que usaba la espiritualidad como excusa para cometer actos sexuales. Tras ser arrestado, fue llevado al Juzgado de Guardia de Ponteareas, donde se le otorgó libertad con cargos mientras continúa la investigación. Las mujeres afectadas relataron que el santero jugaba con su fe, convenciéndolas de que la supuesta sanación solo sería posible a través de encuentros íntimos. Los investigadores confirmaron que utilizaba conjuros y hierbas para dar credibilidad a su engaño. Psicólogos y especialistas en derechos humanos señalaron que estos abusos aprovechan la vulnerabilidad de personas que buscan alivio en prácticas espirituales. La Guardia Civil analiza nuevas denuncias y busca posibles víctimas que aún no se han presentado. Este caso ha generado indignación en Galicia y un fuerte llamado a regular a quienes ofrecen curaciones esotéricas. Vecinos expresaron temor y pidieron controles más estrictos para evitar que se repitan situaciones similares. Los expertos recalcan la importancia de estar alertas ante curanderos que pidan actos extraños o íntimos como parte de una “cura”. El proceso judicial sigue abierto y el juez planea escuchar más testimonios en los próximos días. Las autoridades recomendaron denunciar cualquier conducta sospechosa y no confiar en prácticas espirituales que puedan poner en riesgo la integridad física o emocional. La noticia ha impactado en todo el país por la forma en que se usó la fe como herramienta de abuso.