En el mundo del fitness, el pilates se ha posicionado como el entrenamiento estrella. Su facilidad de práctica y versatilidad lo hacen accesible para todos, convirtiéndose en una opción predilecta durante la pandemia y en la vida cotidiana posteriormente. Una de las joyas de esta disciplina es el ejercicio conocido como 'Bird Dog', cuya efectividad rivaliza con ejercicios consagrados como la plancha o los abdominales.

El Bird Dog se destaca por su sencillez y efectividad. Este ejercicio de bajo impacto se puede realizar en cualquier lugar, sin necesidad de equipamiento especial, lo que lo hace ideal para fortalecer el núcleo del cuerpo y mejorar la postura. Además, es particularmente beneficioso para quienes padecen dolores de espalda baja, ayudando a desarrollar un equilibrio adecuado y mejorando la postura en general.

Lo que hace único al Bird Dog es su capacidad para activar el core a través de un movimiento anti-rotación. Este desafío implica un compromiso total del núcleo para mantener la estabilidad del cuerpo durante las repeticiones, trabajando no solo los músculos abdominales y lumbares sino también la musculatura profunda de la columna.

Realizar correctamente el Bird Dog es crucial para su efectividad. La posición inicial es de rodillas, adoptando una postura de mesa con las manos y rodillas apoyadas en el suelo. Al extender un brazo hacia adelante y la pierna opuesta hacia atrás, se busca mantener el cuerpo en línea recta y la cadera estable, evitando inclinarse. Mantener esta posición por unos segundos, mientras se contraen los músculos del core y se mantiene la espalda recta, maximiza los beneficios del ejercicio.