La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) ha emitido una respuesta oficial frente a la reciente investigación del Municipio de Guayaquil sobre la asignación y utilización de los fondos destinados a la final única de la Copa Libertadores 2022, disputada en el estadio de Barcelona S.C.

La indagación, iniciada por el alcalde Aquiles Álvarez, busca clarificar el destino de los 2 millones de dólares proporcionados por la Alcaldía a la FEF. Esta suma fue aportada como parte de un convenio de cooperación para la organización del evento deportivo que, según la entidad, generó ingresos significativos y publicidad internacional para la ciudad.

El concejal Arturo Escala, quien propuso la creación de la comisión investigadora, señaló que los fondos no solo se destinaron a mejoras en el estadio de Barcelona, sino también a otros estadios como el George Capwell y el Christian Benítez. Esta situación ha generado dudas sobre la distribución y el impacto real de la inversión.

En respuesta, la FEF publicó un comunicado el 16 de febrero, subrayando que Guayaquil fue seleccionada por la CONMEBOL como sede del evento, lo que atrajo a más de 11 mil turistas y generó ingresos superiores a los 16 millones de dólares para la ciudad. Además, enfatizaron que los fondos fueron auditados por la propia CONMEBOL y justificados en su totalidad, incluso devolviendo al municipio un remanente de más de 22 mil dólares.

La documentación referente a estas transacciones ha sido compartida tanto con el Municipio de Guayaquil como con la Contraloría General del Estado, asegurando transparencia y responsabilidad en el manejo de los recursos.

Este caso resalta la importancia de la transparencia en la gestión de fondos públicos, especialmente en eventos de gran envergadura como lo fue la final de la Copa Libertadores 2022, que no solo tienen un impacto deportivo sino también económico y social para las ciudades anfitrionas.