El primer semestre de 2025 dejó cifras escalofriantes en Ecuador. Entre enero y junio se registraron 4.619 homicidios intencionales. El incremento frente al mismo período de 2024 fue del 47 %. La tasa nacional llegó a 25,51 asesinatos por cada 100.000 habitantes. Mayo marcó un récord con 926 muertes violentas en un solo mes. Los más golpeados por esta ola son jóvenes y adolescentes. Hubo 504 víctimas entre 10 y 19 años, un aumento del 68 % frente al año anterior. El grupo de 25 a 29 años concentró el 19,2 % de los casos. Le siguieron las edades de 20 a 24, 30 a 34 y 35 a 39 años. La provincia de Los Ríos tuvo la tasa más alta: 61,32 homicidios por cada 100.000 habitantes. Puebloviejo y Quinsaloma lideraron con cifras que superan los 100 casos por cada 100.000. Entre ciudades grandes, Durán y Babahoyo presentaron tasas alarmantes. Para contener la violencia, el gobierno decretó estado de excepción en El Oro, Guayas, Los Ríos y Manabí. La medida durará 60 días y no incluye toque de queda. El presidente Daniel Noboa convocó a una movilización el 12 de agosto para respaldar leyes contra el crimen organizado. Bandas como Los Choneros y Los Lobos protagonizan parte de la violencia. El narcotráfico, las extorsiones y la minería ilegal agravan el panorama. Las autoridades enfrentan el reto de frenar la escalada. El país vive el semestre más violento de su historia reciente.