Una denuncia ciudadana destapó un caso escalofriante en Esmeraldas. La Policía Nacional ejecutó un operativo que terminó con la captura de cuatro personas por presunta extorsión. Entre los detenidos están dos personas privadas de libertad (PPL), que desde dentro del Centro de Rehabilitación Social habrían ordenado amenazas contra casas y locales en el norte de la ciudad. Las víctimas recibían mensajes aterradores donde les exigían hasta $5.000 para no ser atacadas. Las investigaciones determinaron que dos mujeres serían las encargadas de recolectar el dinero, ya sea por transferencia o en efectivo. Los operativos incluyeron allanamientos dentro de la misma cárcel. Los detenidos fueron identificados como Romina Q., Camila G., Erick Q. y Carlos C. Erick tenía antecedentes por drogas, armas y receptación. Carlos tenía historial por homicidio y tráfico. Se les incautaron cinco celulares que habrían sido usados para las amenazas. La Policía logró detenerlos a tiempo antes de que cobraran más dinero. Todo fue gracias a una denuncia que activó a las unidades de inteligencia. Las mujeres serían las que hacían el trabajo en las calles, siguiendo órdenes desde adentro. Ahora todos están en manos de la justicia. Las autoridades investigan si hay más personas involucradas. También se analiza si esta red operaba en otros sectores. El caso causa alarma por la forma en que las cárceles siguen siendo centros de mando. Las víctimas ahora están bajo resguardo. La Policía pide a la ciudadanía no callar y denunciar estas amenazas. Este caso demuestra que el crimen organizado sigue activo desde los centros penitenciarios. Con esta acción se busca devolver tranquilidad a los vecinos de Esmeraldas. La investigación continúa abierta para dar con todos los responsables. Se espera que los jueces actúen con firmeza ante este delito.