Mientras Ecuador se engalana para recibir el Fin de Año, un inesperado evento en Chone, Manabí, ha alterado las celebraciones navideñas. Un pequeño negocio de fuegos artificiales, ubicado en esta localidad, ha sufrido una explosión que causó un gran alboroto entre los ciudadanos.

El incidente, que tuvo lugar al mediodía del 24 de diciembre, comenzó cuando el establecimiento, lleno de pirotecnia, estalló repentinamente. Los fuegos artificiales comenzaron a dispararse de manera incontrolada, creando una escena caótica que fue capturada por cámaras de seguridad y celulares de los testigos.

Aunque en un principio los transeúntes tomaron el incidente con calma, la situación rápidamente se tornó tensa. Testigos del evento afirmaron que camaretas y bengalas volaban en todas direcciones, poniendo en peligro la seguridad de las personas cercanas. Dos individuos, sorprendidos por la explosión, buscaron refugio en una farmacia cercana.

Tras sofocar las llamas, imágenes captadas por los testigos mostraron los restos del negocio, evidenciando la magnitud del suceso. Hasta el momento, no se han reportado heridos a causa de la detonación, pero las autoridades continúan investigando el origen del incendio, que se sospecha fue provocado por las altas temperaturas.

Este incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad de la pirotecnia durante las festividades, especialmente en áreas urbanas densamente pobladas.