Las autoridades colombianas han puesto bajo la lupa un incidente que ha agitado las fronteras entre Ecuador y Colombia. Se trata del ataque a tiros sufrido por un helicóptero perteneciente al Ejército ecuatoriano, el cual ocurrió el pasado jueves, 14 de marzo, en la localidad de San Lorenzo, Esmeraldas. Según declaraciones del segundo comandante del Ejército colombiano, general Omar Sepúlveda, durante una conferencia de prensa realizada el sábado, todo apunta a la posible implicación de disidencias de las FARC en este incidente.

El general Sepúlveda, en sus declaraciones, sugirió que el helicóptero fue atacado por un grupo al margen de la ley, posiblemente perteneciente a las FARC. Este hecho se enmarca en un contexto de intensa actividad militar en la región, con la destrucción reciente, por parte de las Fuerzas Militares ecuatorianas, de un campamento de procesamiento de cocaína en la frontera con Colombia.

Es relevante destacar el trabajo conjunto entre las Fuerzas Militares de ambos países, que desde el año pasado han estado colaborando en una amplia operación en los departamentos colombianos de Putumayo y Nariño, así como en la provincia ecuatoriana de Esmeraldas. Esta colaboración binacional busca combatir el narcotráfico en la región, coordinando operaciones e intercambiando información de inteligencia de manera regular.

El helicóptero afectado, un Fennec de matrícula AEE-387, resultó con daños en el fuselaje debido a los impactos de las balas. Afortunadamente, la tripulación no sufrió heridas y la aeronave no experimentó fallos en su funcionamiento, según lo informado por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas ecuatorianas el mismo día del incidente.