La Coordinación Zonal 3 de Educación celebró a lo grande el logro de 2.814 estudiantes que culminaron sus estudios. Jóvenes, adultos y adultos mayores de Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo y Pastaza alcanzaron su meta educativa. En Cotopaxi se graduaron 769 personas, en Tungurahua 1.022, en Chimborazo 734 y en Pastaza 289. Cada número refleja historias de lucha, sacrificio y esperanza. Silvana Palma, coordinadora zonal, felicitó a todos por no rendirse. Recordó que la educación es un derecho que cambia destinos. Desde el Ministerio de Educación prometieron seguir impulsando más programas para quienes no pudieron estudiar antes. Jorge Chuez, uno de los graduados, agradeció las oportunidades recibidas. Dijo que gracias a la educación pública ahora sueñan con un futuro mejor. La ceremonia fue un homenaje al esfuerzo de estudiantes y sus familias. Muchos llegaron tras años de trabajo duro y múltiples dificultades. Para ellos, el título es solo el comienzo de nuevos retos. Las autoridades destacaron que este programa especial seguirá abierto para más personas. El compromiso es construir una sociedad más justa e inclusiva. Padres, hijos y abuelos compartieron juntos este gran momento. La emoción de los abrazos y lágrimas llenó cada rincón de las celebraciones. La educación sigue siendo la mejor herramienta para romper barreras. Estos nuevos graduados ya están listos para aportar con sus talentos al país. En cada diploma entregado se selló una promesa de superación y esperanza.