En un giro inesperado para la economía argentina, el presidente Javier Milei anunció la creación de un impuesto extraordinario, denominado 'Tasa Kicillof'. Esta medida busca generar los fondos necesarios para afrontar la deuda de 16.000 millones de dólares que Argentina mantiene con Burford Capital, tras el fallo adverso en el juicio por la reestatización de YPF.

Milei, conocido por sus propuestas económicas audaces, acusó al gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, de ser el principal responsable de esta situación, citando su falta de entendimiento de los mercados financieros y las consecuencias de sus decisiones económicas. La 'Tasa Kicillof', según Milei, servirá para recordar a los argentinos el costo de lo que calificó como "el error de un chico cuya perspectiva ideológica perjudicó a 46 millones de argentinos".

Paralelamente, el Presidente propuso la emisión de un 'bono perpetuo', una medida poco convencional, que implicaría un compromiso de pago continuo por parte de todos los argentinos. Esta decisión ha generado un intenso debate en el ámbito económico y social del país, con opiniones divididas sobre su viabilidad y justicia.

Por otro lado, Milei también abordó la posibilidad de privatizar 41 empresas estatales, incluyendo YPF, el Banco Nación, el Correo y Aerolíneas Argentinas. Esta medida busca aliviar la carga fiscal del Estado y generar ingresos adicionales para enfrentar la crisis económica actual.