El lunes 15 de julio, la Asamblea Nacional de Ecuador se prepara para debatir uno de los temas más sensibles y controvertidos del momento: la Ley Orgánica para la Protección y Defensa de los Animales. La Comisión de Biodiversidad ha convocado este debate para revisar un informe que busca unificar diversas propuestas presentadas por distintos sectores sobre la protección de los animales.

Inicialmente, el proyecto enfrentó críticas significativas por ser percibido como políticamente cargado y alejado de las preocupaciones humanas, con términos como especismo y antropocentrismo dominando la discusión. Sin embargo, el nuevo proyecto intenta ser un compendio más equilibrado, centrado en garantizar la protección adecuada sin socavar los derechos humanos fundamentales.

Los aspectos más destacados del proyecto incluyen el reconocimiento de los animales como seres sintientes y la implementación de medidas contra el maltrato, abandono y uso indiscriminado en actividades como la investigación y el comercio. Sin embargo, la propuesta también aclara que los derechos de los animales no deben equipararse completamente a los de los seres humanos, manteniendo el derecho humano a la alimentación de origen animal como un principio constitucional.

El proyecto también busca establecer un sistema de clasificación adecuada para los animales, determinando las necesidades de protección según sus características específicas. Además, propone la coordinación entre distintos niveles de gobierno para la regulación y control de esta clasificación.

La discusión en la Asamblea no solo será un termómetro de las tensiones existentes entre los defensores de los derechos de los animales y los sectores más tradicionales, sino también una prueba de la capacidad de los legisladores para legislar en temas de gran sensibilidad social y ética.