En un giro reciente en el caso Metástasis, 10 procesados, incluyendo a Mayra Salazar y Daniel Salcedo, han optado por un procedimiento abreviado con la esperanza de recibir sentencias reducidas. Esta modalidad, que permite acuerdos entre la fiscalía y los acusados, podría resultar en condenas significativamente menores a las máximas establecidas para los delitos imputados.

El procedimiento abreviado es un trámite especial donde los acusados aceptan su responsabilidad en los hechos por los que fueron acusados a cambio de una reducción en la sentencia. Este método es particularmente aplicable a delitos con una pena máxima de hasta diez años de privación de libertad, excluyendo delitos graves como secuestro o terrorismo.

La primera audiencia bajo esta modalidad se realizó con el expolicía Gabriel García, alias Doble Rueda, quien fue sentenciado a 40 meses de cárcel después de aceptar su participación en el esquema de delincuencia organizada. La Fiscalía destacó su colaboración en impedir que la policía accediera a información vital de un narcotraficante, contribuyendo así a la red criminal.

Los beneficios de un procedimiento abreviado incluyen la posibilidad de reducir la pena a un tercio de la mínima prevista para el delito, lo que en casos como el de delincuencia organizada, podría traducirse en una condena de apenas unos 20 meses para quienes acepten su responsabilidad como colaboradores.

El código penal requiere que cualquier acuerdo en el procedimiento abreviado sea documentado detalladamente, incluyendo la descripción de los hechos acordados, los elementos de convicción y la pena negociada. Además, debe establecerse cómo se realizará la reparación a la víctima, incluyendo el monto económico.

A pesar de las ventajas potenciales, el juez tiene la autoridad para rechazar el acuerdo propuesto si lo considera inapropiado, en cuyo caso los acusados enfrentarían el proceso ordinario sin posibilidad de reducción de sentencia.

Las audiencias continuarán con otros acusados que también se han acogido a esta modalidad, esperando una resolución que podría establecer un precedente importante en cómo se manejan casos similares en el futuro. Este enfoque no solo agiliza el proceso judicial sino que también ofrece a los acusados una oportunidad para mitigar sus penas, al tiempo que aceptan responsabilidad por sus actos.