El pasado martes 27 de agosto, la periodista Thalía Flores vivió un angustiante episodio en el norte de Quito, cuando fue víctima de un violento asalto que terminó causándole una fractura. El incidente ocurrió en el barrio Bellavista, mientras Flores se dirigía a una reunión con colegas de su profesión.

De acuerdo con la organización Fundamedios, Flores estaba estacionada en la calle Montúfar, intentando verificar la dirección de la casa donde se llevaría a cabo la reunión. Al sacar su teléfono celular para confirmar la dirección, fue repentinamente abordada por la espalda por un hombre que la sujetó con fuerza.

Flores relató que, aunque el asaltante logró arrebatarle el teléfono en cuestión de segundos, el ataque no terminó ahí. A pesar de tener el dispositivo en su poder, el agresor continuó zarandeándola violentamente, susurrándole algo que ella no logró entender debido a la proximidad de su boca a su cabeza. La violencia del asalto fue tal que Flores fue derribada al suelo, donde no pudo incorporarse de inmediato.

El agresor no se llevó la cartera de Flores, que cayó durante el forcejeo, sino únicamente su celular. La periodista quedó con una fractura a consecuencia del ataque, lo que demuestra la brutalidad con la que fue agredida.

Varios de sus colegas, quienes esperaban su llegada para la reunión, salieron a socorrerla tras escuchar el alboroto. Este incidente resalta la creciente preocupación por la inseguridad en la capital ecuatoriana, donde los asaltos violentos han ido en aumento, afectando a ciudadanos de todas las profesiones y estratos.

Fundamedios ha expresado su solidaridad con Thalía Flores y ha instado a las autoridades a tomar medidas urgentes para combatir la violencia que azota a Quito, especialmente en zonas que anteriormente eran consideradas seguras. Este tipo de agresiones no solo pone en riesgo la integridad física de las personas, sino que también genera un ambiente de temor e inseguridad que afecta a toda la comunidad.