Eminem ha regresado con su duodécimo álbum de estudio, 'The Death of Slim Shady (Coup de Grâce)', lanzado el pasado viernes. Este álbum, que se esperaba con gran anticipación por parte de sus fanáticos, ha resultado en una recepción dividida y, en muchos casos, severamente crítica.

A pesar de ser un álbum conceptual que refleja la muerte de su alter ego, Slim Shady, y contener guiños a sus primeras obras, el álbum ha sido criticado por su falta de innovación y frescura. Respetados medios como Rolling Stone y Pitchfork no solo han dado al álbum bajas puntuaciones, sino que también lo han descrito como un intento fallido de revivir su imagen pasada.

Las críticas apuntan a que Eminem parece estar buscando validación más que ofrecer algo nuevo a la industria musical. Las acusaciones van desde seguir culpando a las mujeres de sus problemas hasta no adaptarse a un entorno cultural cambiante. Esto refleja un desfasaje con las expectativas y el contexto actual de la música.

Este álbum, que coincide con el 25º aniversario de su debut, parece haber sido un intento de agarrarse a una nostalgia que, según críticos, no ha sabido revivir. La crítica de Pitchfork lo resume diciendo que el álbum "simplemente se siente triste", mostrando un Eminem que no logra adelantarse a su imagen de "hombre blanco viejo asustado por una cultura que cambia".

Con 19 nuevas canciones que parecen entrar por un oído y salir por el otro, 'The Death of Slim Shady' marca, quizás, un punto de inflexión crítico en la carrera de Eminem. La pregunta que queda es si podrá reinventarse de una manera que resuene con las nuevas generaciones y críticas actuales.