La Fiscalía cumple cinco días presentando peritos y testigos en el caso Vaca-Cajas-Jarrín. Busca probar detención irregular y tortura ocurridas en noviembre de 1985 contra Luis Vaca, Susana Cajas y Javier Jarrín. La audiencia arrancó el 5 de noviembre en la Corte Nacional de Justicia. Los jueces son Javier de la Cadena, Manuel Cabrera y Katty Muñoz. Carlos Alarcón, fiscal general subrogante, acusa a seis procesados por crimen de lesa humanidad. En la lista están Luis Eduardo P., Manuel Marcelo D., Juan Raúl V., Mario Ricardo A., Nelson Bolívar E. y Fernando Ignacio R. Cerca de 30 peritos y testigos ya han sido evacuados en sala. Las víctimas y su abogado asisten de forma presencial, igual que las defensas. El proceso nació en 2013 tras el informe de la Comisión de la Verdad que documentó 118 casos entre 1984 y 2008. En 2014 la jueza Lucy Blacio llamó a juicio a nueve personas, en su mayoría militares y policías en retiro. Desde entonces fallecieron Jorge A., Guillermo R. y Edgar V., excomandante de Policía. La teoría fiscal habla de una actuación coordinada del Estado con cadena de mando, inteligencia, custodia, interrogatorio y apoyo médico. Según Alarcón, los tres integrantes de AVC fueron capturados sin orden judicial en Esmeraldas por personal militar. La causa remueve memorias de la guerra contra el grupo Alfaro Vive Carajo en los años ochenta. La defensa de víctimas intervendrá cuando concluya la Fiscalía. Luego será el turno de las defensas de los seis acusados con su propia prueba. El debate jurídico choca con la política fuera de la sala. Jaime Nebot escribió “¿Desmemoriados?” y difundió un comunicado del PSC. Esa postura reivindica la ofensiva del Estado bajo León Febres Cordero y acusa a AVC de asaltos, robos, asesinatos y secuestros. Con el juicio en marcha, el país mira si habrá verdad judicial sobre lo que pasó en 1985.