En un operativo sin precedentes, la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria de Ecuador (ARCSA), ha puesto al descubierto una extensa red de comercio ilegal de productos naturales y medicamentos. Más de cuatro mil productos, entre los que se incluyen dispositivos médicos y fármacos, han sido incautados en una inspección realizada en el cantón Pujilí, perteneciente a la provincia de Cotopaxi.

Los establecimientos inspeccionados, que también se extendían por las provincias de Chimborazo, Tungurahua y Pastaza, han sido objeto de un estricto control para garantizar el cumplimiento de las normativas sanitarias ecuatorianas. La medida surgió tras verificar que muchos de estos productos no contaban con el permiso de funcionamiento necesario ni con el registro sanitario que garantice su seguridad y legalidad.

La ARCSA utilizó su aplicación móvil para llevar a cabo las verificaciones, un método que permitió identificar rápidamente aquellos productos que no cumplían con los requisitos legales para su venta y distribución. La acción culminó con la clausura de un local en Pujilí, donde se realizaban prácticas no autorizadas como la venta de medicamentos y la realización de procedimientos invasivos.

Con el fin de proteger la salud de los ciudadanos, ARCSA ha iniciado el proceso sancionador siguiendo lo estipulado en los artículos 130 y 140 de la Ley Orgánica de Salud. Además, hacen un llamado a la ciudadanía para que reporten cualquier irregularidad a través de la aplicación ARCSA Móvil, disponible gratuitamente para dispositivos móviles.

Este evento subraya la importancia de la regulación y el control en la venta de productos medicinales y naturales, reafirmando el compromiso de ARCSA con la salud de la población ecuatoriana.