En Corea del Sur, una tendencia sorprendente ha comenzado a tomar protagonismo: la adopción de perros y gatos ha superado la tasa de natalidad en el país. Los surcoreanos, especialmente los jóvenes, han optado cada vez más por permanecer solteros y sin hijos, lo que ha generado una crisis de natalidad que se ve reflejada en el aumento de hogares unipersonales, que representan actualmente más del 40% de los hogares en el país.

En el tercer párrafo: Esta preferencia por las mascotas, en particular los perros, se ha convertido en una característica destacada en la vida urbana de Corea del Sur. La pandemia aceleró la decisión de muchas personas de traer un animal de compañía a sus hogares. Según estimaciones del gobierno, mientras en 2010 solo el 17.4% de los hogares tenía mascotas, hoy en día el 25% de las familias cuenta con al menos un perro en casa.

Además, el paisaje urbano ha cambiado notablemente. Las clínicas de maternidad han comenzado a desaparecer, siendo reemplazadas por hospitales y tiendas especializadas en productos para mascotas. Incluso las plataformas de compras en línea reportan un incremento en las ventas de coches para perros, superando la demanda de coches para bebés, lo que resalta aún más el cambio en las prioridades de la sociedad surcoreana.

Sin embargo, este auge en la adopción de mascotas también ha generado controversias. El año pasado, activistas de derechos de los animales descubrieron una tienda de cachorros en condiciones deplorables y, junto a las autoridades, lograron rescatar a más de 1,400 perros. Esta situación ha impulsado a la Asamblea Nacional a proponer la prohibición de la venta de cachorros y a endurecer las regulaciones para los criadores, con el fin de proteger el bienestar animal.

La tendencia plantea una pregunta para el futuro: ¿será que algún día habrá más perros que bebés en Corea del Sur?