En un desarrollo significativo dentro del sonado caso Metástasis, Mayra Salazar ha sido condenada a 15 meses de prisión por su participación como autora directa en delitos de delincuencia organizada. La sentencia fue dictada en una audiencia en la Corte Nacional de Justicia el 24 de julio de 2024, donde la fiscal Diana Salazar, participando telemáticamente, propuso esta condena tomando en cuenta la cooperación eficaz de Salazar en la investigación.

Durante la audiencia, la Fiscalía presentó treinta y nueve elementos de convicción que demostraron la implicación directa de Salazar en actividades criminales, destacando su papel central en una red que comprometía a altos funcionarios judiciales y figuras criminales en corrupción sistemática. La procesada optó por el procedimiento abreviado, aceptando su responsabilidad y los hechos, lo que le permitió beneficiarse de una reducción significativa en la pena que originalmente podría haber alcanzado los 40 meses.

Además de la condena de prisión, Mayra Salazar se comprometió a pagar una multa de USD 5.520 y una reparación integral de USD 11.040, incluyendo disculpas públicas. Este acuerdo refleja un esfuerzo por parte del sistema judicial para no solo castigar el delito, sino también reparar el daño causado a la sociedad y fomentar la colaboración de los implicados en revelar prácticas corruptas más amplias.

La Fiscalía explicó que Salazar operaba desde la Corte Provincial de Justicia de Guayas entre mayo y octubre de 2022, utilizando su influencia para manipular decisiones judiciales a favor de intereses criminales, incluyendo ofrecer sobornos a jueces para obtener fallos favorables. Estos hechos subrayan la complejidad y la profundidad de la corrupción dentro de ciertos sectores del sistema judicial, y la sentencia de Salazar representa un paso crucial en la lucha contra la impunidad en Ecuador.