Kylian Mbappé se convirtió en el centro de atención en Paderborn, donde la selección francesa de fútbol aterrizó para su participación en la Eurocopa 2024. El avión procedente de París aterrizó a las 11:30, llevando a bordo a uno de los jugadores más emblemáticos del fútbol actual, ahora parte del Real Madrid.

Desde su llegada, Mbappé ha estado en el foco de los jóvenes y medios de comunicación, quienes no perdieron la oportunidad de captar cada momento del delantero. La recepción en el aeropuerto fue vibrante, con aplausos y vítores que resonaron en todo el terminal. El equipo de seguridad tuvo que intervenir para mantener el orden ante la euforia desatada.

El delantero francés no solo atrajo la atención de los fanáticos, sino que incluso la policía alemana se tomó un momento para fotografiarse con él, mostrando la gran admiración que Mbappé despierta. La selección, alojada en un hotel a las afueras de la ciudad, busca tranquilidad antes del inicio del torneo, pero la presencia de Mbappé hace difícil pasar desapercibidos.

Francia, que no ha ganado la Eurocopa desde hace 24 años, ve en esta edición una oportunidad de oro. Mbappé, como capitán, es visto como clave en la aspiración de reconquistar el título. La expectativa es alta y el equipo siente la presión y el apoyo de una nación que ansía volver a ver a su equipo en lo más alto de Europa.