Es un día memorable para la medicina mundial. Los Hospitales Universitarios de Ginebra, en Suiza, han reportado un caso de remisión de VIH, marcando el sexto caso de esta índole en todo el mundo. Esta noticia es un rayo de esperanza para millones que luchan contra esta enfermedad devastadora.

El paciente, un hombre de Ginebra que vivió con el VIH desde principios de los noventa, mostró signos de remisión después de un trasplante de médula ósea. Esta estrategia se basa en el uso de un donante con la mutación genética CCR5 delta 32, conocida por su resistencia natural a las células del VIH.

Después del trasplante, las células sanguíneas del paciente fueron reemplazadas completamente por las del donante. Esto resultó en una disminución drástica del número de células portadoras del VIH, lo que llevó a la suspensión del tratamiento antirretroviral en 2021.

Aunque el caso es prometedor, los expertos insisten que el virus puede persistir en el cuerpo del paciente. Sin embargo, el éxito de este caso proporciona información vital para entender los mecanismos de eliminación y control de los reservorios virales.