En un nuevo capítulo del drama Biden, Hunter Biden, el hijo del presidente de EE.UU., Joe Biden, grita "soy inocente" a los cuatro vientos. Su abogado, Abbe Lowell, confirmó hoy que el hijo del mandatario estadounidense se declarará inocente ante los tres cargos penales vinculados a la compra de un arma de fuego en 2018. La trama se complica y las preguntas se multiplican.

Lowell solicitó que la primera comparecencia ante el tribunal se realice de manera remota, para evitar una "carga innecesaria sobre los recursos gubernamentales" y minimizar interrupciones causadas por la seguridad. ¿Trato especial o jugada inteligente? La decisión está en manos del juez Christopher Burke, quien ha pedido más detalles por escrito.

El delito por el que se acusa a Biden es serio: mentir en un formulario federal para comprar un arma mientras consumía drogas ilegales. Si es declarado culpable, podría enfrentar hasta 25 años de prisión. El arma en cuestión fue encontrada posteriormente en un contenedor de basura. ¿Accidente o intencional? Las autoridades siguen investigando.

En un giro sorprendente, los analistas legales señalan que los cargos contra Biden podrían enfrentar un desafío constitucional. Con la Casa Blanca y los republicanos tomando bandos opuestos, Hunter se convierte en el centro de una tormenta política. ¿Será este el escándalo que sacuda a la Casa Blanca o un intento fallido de desprestigiar al presidente Biden?