Un violento enfrentamiento entre bandas dejó un saldo de un fallecido y cuatro heridos en la Cooperativa Flor de Bastión, en Guayaquil, la tarde del lunes 26 de agosto de 2024. Este hecho, que se suma a la creciente ola de violencia en la ciudad, ha encendido nuevamente las alarmas sobre la seguridad en la urbe.

De acuerdo con el reporte policial, el enfrentamiento ocurrió entre presuntos miembros del grupo de delincuencia organizada "Los Tiguerones" y una facción rival conocida como "Los Tiguerones Diamante". Las autoridades fueron alertadas sobre la situación tras recibir información sobre un grupo de individuos armados que se encontraban amedrentando a los transeúntes en las cercanías del Bloque 6 de la Cooperativa Flor de Bastión. Los delincuentes, que se movilizaban en una motocicleta, realizaron varias detonaciones, lo que desató el caos en el lugar.

En respuesta a la emergencia, unidades especializadas de la Policía Nacional desplegaron un operativo de localización y captura. Durante la intervención, lograron aprehender a Kevin S., de 22 años, quien portaba un arma de fuego calibre 9 milímetros. Junto a él, también fue detenido un adolescente de 17 años que conducía la motocicleta utilizada en el incidente. Ambos fueron capturados en flagrancia y puestos a disposición de las autoridades competentes.

Pero la operación no terminó allí. En un segundo operativo, las unidades policiales se dirigieron al Bloque 9 de la misma cooperativa, donde, según información obtenida, un grupo de "Los Tiguerones Diamante" se encontraba reunido en un inmueble abandonado. Al llegar al lugar, la Policía logró la aprehensión de tres sujetos más: José Ll., Ronny N. y José B., quienes fueron encontrados con armas de fuego, un chaleco de protección balística, pasamontañas, celulares y otros objetos relacionados con actividades ilícitas.

Los cinco detenidos fueron trasladados a la Fiscalía de Flagrancia en Guayaquil, donde se iniciaron los procedimientos legales correspondientes. El fiscal de turno confirmó que se procedería con las acciones judiciales contra los aprehendidos por su presunta participación en el enfrentamiento y otros delitos conexos.

Este incidente subraya la creciente violencia en Guayaquil, una ciudad que ha visto un aumento en la actividad de bandas criminales en los últimos años. La Policía Nacional continúa trabajando en operativos para desarticular a estos grupos y devolver la tranquilidad a las zonas más afectadas por la delincuencia. Sin embargo, la comunidad sigue exigiendo acciones más contundentes para garantizar la seguridad en las calles y prevenir nuevos enfrentamientos que pongan en riesgo la vida de los ciudadanos.