En un mundo donde la desinformación y las imágenes creadas con inteligencia artificial están en auge, la Iglesia Católica ha decidido actualizar y endurecer sus reglas para evaluar y reconocer los supuestos fenómenos sobrenaturales o apariciones divinas. Este nuevo documento, difundido por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe y firmado por el Papa Francisco, busca ofrecer una interpretación más estricta y clara sobre estos eventos, que han sido una constante en la historia de la fe católica.

El documento establece nuevas directrices para la evaluación de apariciones de la Virgen María, Jesucristo y otros fenómenos sobrenaturales como estatuas que lloran sangre o personas que aseguran tener estigmas similares a las heridas de Cristo. “Hemos llegado a la convicción de que estas situaciones complicadas, que producen confusión en los fieles, deben evitarse siempre”, expresó el cardenal Víctor Manuel Fernández, resaltando la importancia de mantener la claridad y la verdad en la fe católica.

La decisión de revisar y actualizar estas reglas se debe, en gran parte, al auge de las tecnologías modernas y las herramientas de inteligencia artificial que pueden crear imágenes y situaciones muy realistas, complicando aún más la labor de discernir lo verdadero de lo falso. En palabras de Robert Fastiggi, maestro en teología mariana en el Seminario Mayor del Sagrado Corazón en Detroit, Michigan, “Tenemos que creer que estas apariciones son posibles, pero también tenemos que tener un tipo de escepticismo saludable”.

Estas nuevas medidas buscan proteger a los fieles de la desinformación y asegurar que la fe se mantenga basada en hechos verificables y auténticos. La Iglesia Católica reafirma su compromiso con la verdad y la claridad, adaptándose a los nuevos desafíos que presenta el mundo moderno.