Cinco trabajadores fueron asesinados el 23 de agosto de 2025 en Crucita, Portoviejo. La Policía confirmó que las víctimas habían recibido amenazas antes del ataque. El grupo de hombres viajaba en un Hyundai gris tras trabajar en el muelle Los Arenales. Allí habían tomado medidas para reparar un barco. Al regresar hacia San Jacinto, fueron emboscados por sicarios. Los atacantes dispararon con fusiles de calibres 7.62 y 5.56. En la escena quedaron 40 casquillos y cinco celulares. Las víctimas, de entre 22 y 38 años, recibieron tiros en la cabeza y el pecho. Ninguno sobrevivió. El carro de los sicarios tenía placas adulteradas. Luego fue hallado a dos kilómetros de la escena, incinerado. La Policía lo identificó como robado. Hasta el 24 de agosto no se reportaron detenciones. Los nombres de las víctimas no se revelaron. La Fiscalía abrió una investigación por asesinato. Los celulares encontrados están bajo análisis. La violencia en Manabí no se detiene. En lo que va del 2025 se registraron 770 homicidios. De esos, 220 ocurrieron en Portoviejo. Crucita ya había sido escenario de otro crimen el 24 de julio, cuando mataron a un militar y a su hija. Las bandas Los Choneros y Los Lobos se disputan el control del narcotráfico en la zona. La Policía cree que este ataque fue un ajuste de cuentas. Más de 2.000 militares fueron desplegados en Manabí desde julio. Pese a los operativos, los crímenes siguen golpeando a la provincia. Las autoridades aseguran que darán prioridad a la captura de los responsables.