El número de niños y jóvenes que asisten a la escuela en el mundo ha alcanzado cifras históricas, según un reciente informe de la Unesco presentado en Fortaleza, Brasil. La educación se ha convertido en un derecho accesible para más personas, alcanzando un total de mil 412 millones de chicos en el sistema educativo, un aumento significativo de 110 millones en comparación con 2015. Este avance es una buena noticia para la comunidad internacional y marca un hito en la historia de la educación.

Sin embargo, la Unesco advierte que, a pesar de este progreso, aún existen profundas brechas. En todo el mundo, 251 millones de niños en edad escolar se encuentran fuera de las aulas, una cifra alarmante que resalta las desigualdades socioeconómicas que persisten en diversas regiones. "Hoy hay más niños que nunca escolarizados y progresando en su educación", afirma el informe, pero esto no es suficiente para erradicar la exclusión.

La tasa de finalización de estudios también muestra una mejora, alcanzando el 88% en educación primaria y el 59% en secundaria, lo que representa un avance considerable desde el 85% y 53%, respectivamente, en 2015. Esto significa que, ahora, 40 millones de jóvenes más han culminado sus estudios básicos en comparación con hace ocho años.

A pesar de los avances, la Unesco recalca que los desafíos aún son grandes, especialmente para aquellos niños que enfrentan barreras económicas y sociales. La organización continúa trabajando en conjunto con los gobiernos para implementar políticas inclusivas que aseguren el acceso a la educación para todos. La meta: que cada niño y joven tenga una oportunidad justa de formarse y construir un mejor futuro.