La actividad del Volcán Sangay, ubicado en Morona Santiago al sur del Ecuador, ha registrado un incremento significativo, según informes del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional. Desde las 10:00 de este martes 9 de julio de 2024, se observó una nube de ceniza que alcanzó una altura de menos de 3 km sobre el nivel del cráter, desplazándose hacia el occidente impulsada por el viento.

El último reporte, emitido a las 17:50 del mismo día, confirmó que la nube de ceniza había llegado al cantón Guamote, en la provincia de Chimborazo, aumentando la preocupación entre los residentes de la zona. Esta situación se agravó al día siguiente, cuando la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos informó sobre la caída de ceniza en la parroquia Copalillo y el cantón Cumandá.

La comunidad local ha experimentado no solo la caída de ceniza, sino también fenómenos acústicos asociados con la actividad del volcán. Alrededor de las 19:06 del martes, el ECU911 recibió llamadas de ciudadanos en el sector San Luis, sur de Riobamba, reportando vibraciones en puertas y ventanas y un profundo bramido proveniente del volcán. Estos sonidos también fueron reportados por usuarios en redes sociales en varias ciudades del Ecuador.

Ante estos eventos, la Secretaría de Riesgos ha instado a la población a tomar medidas preventivas y de autoprotección. Además, ha reforzado la importancia de mantenerse informado a través de canales oficiales y seguir todas las recomendaciones de las autoridades para asegurar su bienestar y seguridad.

El Instituto Geofísico ha asegurado que estos fenómenos son parte de la actividad normal del volcán y que no es la primera vez que ocurren, pero sigue siendo crucial la vigilancia constante. Las autoridades continúan monitoreando la situación del volcán Sangay y están preparadas para responder ante cualquier eventualidad que pueda afectar aún más a la comunidad.