Brasil podría reinstaurar el horario de verano ante la peor sequía en décadas

Brasil enfrenta la peor sequía registrada desde los años 50, una crisis que está afectando no solo a las reservas de agua, sino también al sistema eléctrico del país. La falta de lluvias y los incendios que han devastado miles de hectáreas representan una grave amenaza para la infraestructura energética, y el gobierno ya analiza posibles soluciones.

Ante esta situación, el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, ha revelado que el regreso del horario de verano es una opción que está "sobre la mesa". Esta medida, que consistiría en adelantar una hora el reloj para aprovechar más la luz natural del día, podría ser clave para reducir la demanda energética en las horas pico.

El horario de verano fue instaurado en Brasil en 1931 y permaneció vigente hasta 2019, cuando el expresidente Jair Bolsonaro decidió suspenderlo al considerar que sus beneficios eran mínimos. Sin embargo, la crisis actual ha reavivado el debate. Silveira subrayó que, aunque no hay riesgo inmediato de racionamiento eléctrico, la medida podría ayudar a reducir el consumo y evitar una mayor presión sobre el sistema.

Además de la sequía, los incendios forestales en varias regiones del país agravan la situación. Estos incendios no solo ponen en peligro la biodiversidad y las viviendas, sino que también amenazan las líneas de transmisión eléctrica, lo que podría desencadenar interrupciones en el suministro.

El cambio de horario sería una medida temporal, pero eficaz para enfrentar la crisis energética que azota al país. Los brasileños, por tanto, podrían volver a adelantar sus relojes como lo hacían antes de 2019. ¿Será esta la solución definitiva para superar la crisis eléctrica? Solo el tiempo lo dirá.