Gobierno en apuros: cancelación del campo Sacha agrava la crisis


Se cae millonario contrato petrolero y la economía sigue en picada
El Gobierno de Daniel Noboa enfrenta una crisis económica más profunda tras cancelar la adjudicación del campo Sacha. El consorcio que debía pagar USD 1.500 millones no cumplió con el desembolso, dejando un hueco en las finanzas del país.
La ministra de Energía, Inés Manzano, informó sobre la decisión, generando una ola de críticas. Este anuncio llega en medio de una economía debilitada, con deudas en aumento y un país en recesión.
El campo Sacha fue adjudicado a Sinopetrol el 1 de marzo de 2025. Según el Gobierno, esto permitiría aumentar la producción petrolera y generar recursos para inversión social. Sin embargo, el proceso de entrega, anunciado en pleno feriado de Carnaval, levantó sospechas y protestas.
El contrato establecía que, durante 20 años, el consorcio recibiría hasta el 87,5% de la producción del campo, dejando al Estado con apenas el 12,5%. Especialistas y ciudadanos consideraron que Ecuador salía perdiendo con este trato.
La crisis económica ya golpea fuerte: negocios sin clientes, taxis vacíos y calles llenas de personas que solo compran lo esencial. Según el Banco Central, Ecuador entró en recesión en 2024. La deuda del país pasó de USD 43.000 millones en 2017 a USD 88.400 millones en 2025.
Además, el campo Sacha enfrenta problemas de infraestructura. Petroecuador operó con equipos deteriorados, pozos sin mantenimiento y un sistema contraincendios fuera de norma. Aunque el petróleo de Sacha es de fácil extracción, Ecuador carece de tecnología para explotarlo sin inversión privada.
El campo ha sido codiciado por varios gobiernos. Rafael Correa, Lenín Moreno y Guillermo Lasso intentaron concesionarlo sin éxito. Ahora, Noboa lo canceló, dejando dudas sobre el futuro del sector petrolero y la economía del país.